sábado, 20 de diciembre de 2014

Bien dicen por ahí que si no puedes con el enemigo, únetele.

 

Hubiera dado cualquier cosa por ver la cara de Eviel cuando supo que Héctor Pablo había solicitado una reunión con Alejandro Murat. Una reunión en un sitio concurrido,  donde a todas luces se veía el interés del lechero nacional por mostrar su cercanía con el cachorro Murat.

La suspicacia de tan mencionado encuentro ha dejado de ser un chisme para ser una triste realidad para el senador de chiripa: Héctor Pablo cedió ante la superioridad de Alejandro Murat como candidato a la gubernatura de Oaxaca.

Era tanta la ansiedad de HP porque lo vieran junto al más candidateable de los oaxaqueños, que incluso llamó a los medios de comunicación de su confianza para que acudieran a tomar fotografías. Todo con tal de enviar un mensaje de “unidad al interior de la juventud priísta”.

Mientras en algún lugar del DF o la capital oaxaqueña, Eviel se paseaba en su Mazda gris haciendo puchero y buscando el respaldo de su padrino el tirano de chalcatongo, pues es evidente que se ha quedado sólo, bueno con “su amigo” que negoció la gubernatura en el 2010 y lo evidenció como un perdedor absoluto.

Lo que sí es sorprendente es que los amanuenses del técnico con complejo de licenciado no hayan emitido ningún comentario al respecto. ¿Será que les comió la lengua el gato, o se les acabo la beca?

Ojalá y el Doctor ocupe sus amplios conocimientos sociológicos y asesore a su patrón Eviel para que se deje de berrinches y se ponga a trabajar, porque la suerte no le va a durar toda la vida.

Hablando del doctor Felipe Pérez –perdón Martínez- ¿hasta cuando pensará seguir negando su relación con La Pluma de Oaxaca? ¿Para qué se esconde? ¿Le dará vergüenza lo que ahí se dice?

Si así fuera, sería totalmente comprensible, pues esa pseudocolumna ha exhibido lo que significa el terrorismo periodístico. Bravo, Soriano y Martínez son capaces de inventar cualquier cosa para tener contentos a sus patrones, y ocultan con cinismo los actos de corrupción y abusos cometidos en el sexenio de URO.

Incluso agarraron de bandera el caso de un nuevo personaje que se quiere subir a la contienda por la silla de Juárez, ni más ni menos que el empresario Gerardo Gutiérrez Candiani, quien según esta asesorado por el gris de Paco Reyes, y no le decimos gris porque sea su color favorito, sino porque de ese tono es su paso por las sesiones de cabildo.

Por ejemplo, se les ocurrió manipular a través de sus amanuenses, el resultado de una encuesta nacional realizada por el Instituto Mexicano de la Competitividad, A.C, (IMCO) –por cierto del cual Gutiérrez Candiani forma parte, exhibiendo aún más que no les importa lo que tengan que hacer para lograr sus objetivos.

Al parecer, el líder empresarial ha sabido mantener buena relación con los actores políticos estatales y nacionales, no hay duda de que contará con el respaldo del sector, sin embargo, cabe recordar que  el apellido de Gutiérrez Candiani está envuelto en una historia de corrupción, pues resulta que el que fuera director del Seguro Popular en el estado Salvador Monroy es ni más ni menos que el esposo de la hermana de Gerardo, Paulina Gutiérrez Candiani.

Durante el tiempo que estuvo Monroy al frente, el Seguro Popular estableció convenios millonarios con  empresas con domicilio fiscal en la ciudad de Puebla, Puebla. Incluso los trabajadores denunciaron gastos por más de 600 millones de pesos en la compra de medicamentos a las empresas Nacional de Drogas (Nandro) y Audipharma, cuyo aparente dueño es Pablo Escandón.

 

Las cuales, supuestamente elevaron sus precios de manera estratosférica, presentando sus productos como de patente, cuando eran productos similares. Esta investigación sigue pendiente para el gobierno de Gabino Cué, pues al parecer el tema del seguro popular hasta el momento no ha podido ser auditable.

 

Vuelvo a preguntar, ¿se quitará Felipe René Martínez Pérez la piel de oveja?



¿Dejará que René hable de las irregularidades que hubo en la administración pública cuando él y su esposa fueron funcionarios y de la protección a delincuentes como Manuel Bravo?

¿Cuándo explicará de donde sacaron los recursos para las mansiones que construyeron los papás de René Pérez por la zona de Etla?


Una última petición don Felipe, devuelva las tierras que se apropió por Ocotlán, recuerde que no es de buenos cristianos quedarse con lo que no es suyo. Se lo dejo de tarea.

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